Sin botox menos 15 años garantizado

Gabriela Rodríguez
Ganadora del concurso: "Historia de vida sobre como volverse bonita".

Hola, queridos lectores. Quiero contarles mi historia sobre como busqué la belleza en todos lados y al final la encontré en casa.

Vamos a conocernos. Soy Gabriela Rodríguez, tengo 47 años y vivo en Medellín.

Y ahora mi propia historia

Una mañana, me miré en el espejo y solté en llanto. Arrugas profundas en mi frente, enormes pliegues naso labiales, bolsas debajo de los ojos, algunos montículos en mi piel, llega el frío otoño y todo lo que quieres es el caluroso verano. Por alguna razón, recordé la historia de una mujer sobre cómo rejuveneció su rostro en un salón de spa de Túnez. Ahí en la antigua colonia de Francia, trabajan muchos cosmetólogos franceses experimentados en medicina francesa. Es casi como en Francia, pero dos o tres veces más barato. Por eso las visitas a Túnez son muy populares en todo el mundo y en particular desde Francia:-).

"¿Por qué no merezco ser hermosa? – Me decidí y comencé a averiguar sobre un viaje a Túnez. ¡En la primera agencia de viajes me ofrecieron un bono de descuento del 50%! En resumen, dos días después estaba en el centro turístico de Hammamet, el centro de spa más grande de la Bio Azur. Y los magos locales rápidamente se apoderaron de mi cuerpo y rostro. No te voy a contar sobre todo tipo de envoltorios con algas y barro. Eso esta fuera de tema. Te hablare sobre la manera en que trataron mi rostro.

El tratamiento estaba diseñado para 12 días. Al principio, se realiza una fotografía del rostro para que el paciente pueda ver la diferencia. Más adelante, una silla de cosmetología de lujo estaba esperándome. Te sientas en ella y te sumerges en la felicidad. La música sonaba ligeramente, el aire adquiría un agradable aroma y una mujer masajeaba mi rostro con una agradable crema. Todo el procedimiento duro de 15 a 20 minutos. Y así fue durante 12 días. Al final nuevamente una fotografía. Ahí mismo tú puedes ver el resultado.

Las bolsas bajo los ojos, arrugas y pliegues naso labiales ¡desaparecieron! ¡Y junto con ellos prácticamente se esfumaron 15 años de mi rostro! ¡Estaba sorprendida y encantada! Mi cosmetólogo, acostumbrado a la alegría de sus pacientes durante muchos años, me sonrió amablemente. También recordé el nombre de la crema facial que era tan efectiva. Hialuronika ¡Así es como se llama!

Por supuesto, cuando regresé a Colombia, mis conocidas quedaron encantadas. ¡Literalmente me llenaron de preguntas!. A todos les respondí con la verdad. En el fondo de mi felicidad por mi nuevo rostro, de pronto capté la triste mirada de mi madre. Y rápidamente comprendí. Una mujer sigue siendo una mujer a cualquier edad. Y también quiere ser hermosa a cualquier edad. Pero enviar a una mujer de 71 años a Túnez no era una idea realista. Pregunté en las tiendas por esta crema, pero nadie había oído hablar de ella.

Al parecer, nosotros también podemos ordenar esta crema

Paso medio año, y ¡de pronto ocurrió un milagro! Al navegar por Internet me encontré con ¡Hialuronika! Leí un poco y todo parecía coincidir. Sólo que el embalaje no era el mismo que había visto en Túnez. Y el precio era mucho más asequible. ¿O es que cobran tanto por el servicio en Túnez? En resumen, tuve mis dudas, ¡pero aun así realicé el pedido! ¡Yo sabía como era la crema y sabía que funciona. Si en verdad era la verdadera Hialuronika entonces sería una verdadera victoria!

El paquete llegó a los 3 días. E inmediatamente fui por mi mamá. Especialmente porque yo sabía que hacer. Por supuesto, sin la silla de cosmetología, música y aromaterapia. Pero Hialuronika funcionó. En 12 días mi mamá rejuveneció 15 años. ¡Un año por día!

Aquí, presento los resultados de mi trabajo:

Inmediatamente ordené seis tubos más para mí, mi madre y mi amiga. Ya que nunca había visto nada mejor para la piel del rostro. Y un rápido resultado. ¡Una belleza!

Esa es toda la historia. Espero que mi experiencia sea útil para muchas personas. Después de todo, una mujer a cualquier edad debe ser hermosa.

Ir al sitio de Hialuronika >>>

Con cariño, Gabriela Rodríguez